Enfermedades que puedes contraer en la playa
El verano es la época perfecta para disfrutar de la playa, pero también puede ser un lugar donde puedes contraer diversas enfermedades. Es importante estar informado sobre los peligros para poder tomar precauciones y evitar riesgos innecesarios.
Infección por anquilostoma
Una infección por anquilostoma es una enfermedad que comienza con un paseo relajante por la playa, pero puede terminar en picazón intensa y tos persistente. Esta infección es causada por un parásito que vive en los intestinos de los perros y se transmite a los humanos a través de la arena contaminada. La larva del parásito penetra en la piel, llega al torrente sanguíneo y finalmente infecta los pulmones. Para prevenir esta enfermedad, es recomendable usar sandalias en la playa y evitar el contacto directo con la arena.
P. Dermitis
La P. Dermitis es una infección cutánea causada por bacterias como el Staphylococcus aureus y el Streptococcus del grupo A. Estas bacterias pueden encontrarse en la arena de la playa y pueden causar una erupción pruriginosa en la piel. Si tienes contacto con estas bacterias, es posible que se alojen en tus fosas nasales y provoquen síntomas como pústulas y costras en todo el cuerpo. Si experimentas estos síntomas, es importante acudir al médico para recibir el tratamiento adecuado.
Contaminación fecal
Lamentablemente, algunas playas pueden estar contaminadas con aguas fecales, lo que puede llevar a la ingestión de bacterias intestinales como Escherichia coli. Aunque esto puede provocar náuseas, vómitos y diarrea, generalmente no es grave. Es importante tener cuidado al manipular alimentos y lavarse las manos correctamente después de visitar la playa para evitar la ingestión de estas bacterias.
Algas tóxicas
En algunos casos, el agua del mar puede estar contaminada con dinoflagelados, microorganismos unicelulares que pueden volverse peligrosos bajo ciertas condiciones. Estos organismos se alimentan de nutrientes presentes en las corrientes marinas y proliferan cuando la temperatura del agua es adecuada. La toxicidad de estas algas puede provocar alergias cutáneas, dermatitis, irritaciones y erupciones en la piel. Si se sospecha la presencia de algas tóxicas, es recomendable evitar el contacto directo con el agua.
Conjuntivitis
La conjuntivitis es una inflamación del tejido fino que recubre los párpados y puede ser causada por bacterias presentes en el agua del mar o por la irritación del cloro de las piscinas. Es importante tener precaución al bañarse para evitar la exposición prolongada a la humedad, que puede facilitar la entrada de bacterias al ojo. Si experimentas síntomas de conjuntivitis, como enrojecimiento, irritación y picazón en los ojos, es recomendable consultar a un médico.
Pie de atleta
El pie de atleta es una infección fúngica que afecta los pliegues entre los dedos de los pies, causando sequedad, descamación y picazón intensa. Los hongos que provocan esta infección suelen encontrarse en zonas húmedas, como la orilla del mar o las duchas de las playas. Para prevenir el pie de atleta, se recomienda secar bien los pies después de mojarlos en estas áreas.
Otitis externa
La otitis externa es una infección del oído que suele ocurrir después de una exposición prolongada a la humedad. Esto puede ocurrir al nadar en el mar o al dejar agua atrapada en el oído durante un período prolongado. La otitis externa puede ser causada por bacterias, virus u hongos y puede causar dolor intenso. Es importante tener cuidado de no exponer el oído a la humedad durante demasiado tiempo y buscar tratamiento médico si se experimentan síntomas de otitis externa.
Vulvovaginitis
Las vulvovaginitis son inflamaciones e irritaciones de la vagina y la vulva que pueden causar picazón, ardor y dolor al orinar. En el caso de contraer esta afección en la playa, suele ser causada por hongos como Candida que atacan la mucosa de las áreas genitales. Se recomienda tomar precauciones como sentarse directamente en la arena y cambiarse de ropa de baño con regularidad.
Vibrio vulnificus
La Vibrio vulnificus es una bacteria resistente a la sal que puede encontrarse en el agua marina, especialmente en temperaturas superiores a 18 grados Celsius. Esta bacteria puede ingresar al cuerpo a través de heridas y puede causar necrosis si no se trata adecuadamente. Para prevenir la infección por Vibrio vulnificus, es importante tratar cualquier herida de inmediato y tomar precauciones adicionales si tienes heridas abiertas al ingresar al agua.
Aunque la playa es un lugar maravilloso para disfrutar del verano, es importante tomar precauciones para evitar enfermedades. Al caminar por la playa, se recomienda usar sandalias para proteger los pies y evitar el contacto directo con la arena. Además, es fundamental lavarse las manos regularmente, secarse bien después de mojarse y evitar la exposición prolongada a la humedad. Siempre es aconsejable consultar a un médico si experimentas síntomas preocupantes.